VACACIONES EN ROMA

¡Quiero una vespa!, ¡Quiero una vespa!!... para sentirme definitivamente como Audrey Herpburn, paseando por Roma, la ciudad de las motos.
Miro las fotos y no puedo evitar que se me caiga algún lagrimón de nostalgia. Espero que la segunda moneda que tiré en la Fontana de Trevi me devuelva a esta ciudad perfecta, un paraíso donde todo es de diseño. (La primera moneda la tiré fuera de la fuente... jaja!! es dificil pero no atiné y casi le rompo las gafas a un turista japonés con cara de muñeco manga :D)...

Durante el vuelo lo recé todo (me faltó poco para empezar como la niña del exorcista, a rezar en arameo por la abundancia de turbulencias). Pero no hizo falta llegar a ese extremo, porque por fin, tocamos tierra.
Llevada por un enaltecimiento de la amistad (por verme sana y salva...sí me da pánico el avión), casi me arrodillo como el Papa, a plantar un sendo morreo en el suelo romano.

Dos horas esperando a que salieran las maletas y dos horas más entre coger el cercanías, etc... por fin llegamos a la Via Corso, a nuestro hotel, el Gran Plaza, un hotel bastante apañadito para nuestro pequeño presupuesto.

Y allí comenzó la aventura romana.

Contaros que lo he visto todo, todo... Tanto he andado que creo que me podría quitar las piernas y volvermelas a poner... sigo aún días después sufriendo de dolores (¿Por qué en esta ciudad el suelo está empedrado??¿No conocen todavía el asfalto??...en fin).

Estuve en el coliseo, ¡¡jo!! que grande... me sentí allí como una auténtica emperatriz romana, hasta me dieron ganas de bajar el dedo pulgar y gritar eso de ¡a los leones!... Gracias a Dios no lo hice, jaja...
Luego estuve viendo los foros... y echándole imaginación, puesto que ahora solo quedan alguna que otra piedra mal puesta. O bien puesta, porque cuando nadie me veía, aprovechaba las planitas para descansar mis doloridas posaderas...
Vi la boca de la verita... confieso que no me atreví a meter la mano... podría perderla....Me volví más loca de lo que estoy en la zona de tiendas, los locales comerciales, la Piazza Navona, La fontana de Trevi... vamos que lo vi todo... Hasta estuve en la casa del Papa... Uhm!! esta vez no me pude echar en sus brazos...jaja!!...

Mi impresión de Roma: Es una ciudad limpia, impoluta, carente de mendigos, enajenados mentales, feos, cheposos, sucios, no hay perros muy fuerte, ni cacas de perro que pisar acidentalmente. (¿Exterminarán a los defectuosos?).
Eso, sí, los transportes un poco reguleros... ¿Por qué será que en los viajes recuerdo con cariño a mi antes odiado Gallardón?)...

También estuve en Nápoles. Bueno, contaros que es todo lo contrario: sucia, decadente, peligrosa... Nada más bajarnos del tren, una ancianita adorable que iba a nuestro lado nos recomendó quitarnos los relojes y las joyas, y esconderlas en los bolsillos, porque según decía, dudaba de que llegaramos a salvo a la acera de enfrente. Glups!!. al principio pensé. "Buaa!! qué exageradaa!!...pero al salir de la Estación Central y ver lo que había... me faltó poco para ponerme una peluca y gafas de incógnito).

Lo mejor de Nápoles, es precisamente lo peor, su decadencia y la visión de abundantes tenderetes de ropa colgando de cada una de las descoloridas casas. Todo está en ruinas, y es que por algo le denominan el "agujero negro de Italia". Nápoles es un país castigado desde su historia (Ha sufrido las mayores catástrofes del país, las mayores guerras, la erupción del Vesubio de Pompeya, una terrible ofensiva en la II Guerra Mundial), y eso ha quedado patente en el carater de sus gentes... Amantes por partes iguales del fútbol y de la religión católica.

Pero ainsss!! como todo lo bueno termina, este viaje también terminó. Vuelvo más feliz y más profunda quizá, porque los viajes, todos, me producen renacer de mis cenizas. Es como si se parara el tiempo, y desde la distancia mi mente se reorganizara.

Uhmmm!! Para los que os interese como son los chicos y chicas italianos.., me centro en los de Roma, (están mejor, jaja!!). Aunque Mariqui seguro que os podría dar más detalles, puesto que vive allí...
Bueno chicas, los romanos, impresionantes, hasta los feos son wapos!! visten bien, huelen bien, van superpeinados... joé...menudos chulazos, jaja!!. Las niñas, monísimas todas...guapas, bien vestidas, bien pintadas... Vamos que una se siente ahi una traperilla al lado de tanta belleza.

Jo!! Mariqui, me hubiera gustado visitarte!!, ainsss!! la próxima vez que vaya te llamo corriendo. Es lo malo de estos viajes express que no te da tiempo a nada...

Buenco chicos, mañana os cuelgo algunas fotos para que veais algunas cosas que yo he visto (no encuentro el cable para descargarlas, jeje).
Aunque no he podido leeros, que sepais que me he acordado mucho de vosotros!!

Un besazoooo!!